Dado que soy una persona que escucha radio todo el día, los hechos más relevantes grabados en mi memoria los tengo asociados con la radio. El asesinato de Kennedy, los dos 11 de septiembre, el triunfo de Chile en Arica en 1962, el funeral de Monseñor Romero y tantos otros.
Y entre ellos indiscutiblemente está el 16 de octubre de 1998. Eran las 7:40 aprox. de un día sábado y, como siempre, al despertar puse la Cooperativa. La periodista del noticiero (no recuerdo si era Manola Robles, Verónica Franco, pero era una mujer) repitió una noticia llegada poco antes desde Londres: había sido detenido Pinochet en una clínica, en cumplimiento de una orden de captura internacional emanada del tribunal español encabezado por el juez Baltasar Garzón.
En ese momento no le di gran trascendencia. Era muy reciente y no alcanzaba a dimensionar que ese era un hecho que cambiaría la historia moderna de Chile y de la justicia internacional. Recuerdo que media o una hora después llamé a mi cuñada para contarle lo que había escuchado.
Al mediodía la noticia ya se había transformado en un golpe noticioso. Todos opinaban, aunque nadie sabía muy bien como reaccionar (excepto Moreira y la Maldonado, por supuesto, y los familiares de los detenidos-desaparecidos).
Poco a poco, con el transcurso de los días se fue despejando la situación. ¡¡Pinochet era vulnerable!! Esa fue la gran lección. Y me parecen inolvidables las imágenes de Mónica Pérez, Felipe Gerdtzen y el atinadísimo Domingo Valenzuela en las afueras de "The Clinic", de la Cámara de los Lores (y de Virginia Waters después), cubriendo día y noche todas las informaciones de un hito histórico.
¡¡Pinochet estaba preso!! ya no sabía si se movían las hojas!! era de carne y hueso!! Y se empezaron a tramitar los juicios. Premonitoriamente Gladys Marín había presentado la primera querella criminal en su contra en enero de ese año 1998. Luego serían cerca de 500 las que debió tramitar el juez Guzmán.
Y el 25 de noviembre, cómo olvidarlo. Nadie trabajaba. Durante horas estuvimos pegados a la radio. Y los Lores determinaron que no tenía inmunidad. ¡¡Qué alegría más grande!! El dictador era sujeto de juicios criminales.
Pero el gobierno chileno presionó para que no fuera extraditado a España y juzgado como se debía. Consiguieron que Inglaterra lo mandara de regreso, pero con el compromiso que sería juzgado en Chile. Y comenzó el largo camino del juez Juan Guzmán Tapia. Fue interrogado, enjuiciado, "imputado", hasta que la Corte prefirió declararlo demente. El cobarde nunca aceptó sus responsabilidades y se las endosó a sus subalternos, quienes siempre lo defendieron a brazo partido. Pero los traicionó. Como también traicionó a quienes creían que era un hombre honesto y fueron soprendidos con los millones de dólares "escondidos" en el Banco Riggs.
Pero este día abrió los cauces de la justicia. Como bien decía hace algunas semanas una importante luchadora de los derechos humanos, en estos años no se ha hecho mucha justicia, pero se ha encontrado la verdad. Dolorosa y cruel verdad, pero esa es una parte muy importante, saber qué pasó. En casi todos los procesos los jueces han logrado determinar por quién, cómo y cuándo fueron asesinados y desaparecidos tantos hombres y mujeres y ese es un gran avance.
Ayer 15 la Corte Suprema sentenció definitivamente al jefe de la Caravana de la Muerte, que sembró el terror y llenó de sangre más de una decena de ciudades en octubre de 1973, a 6 años de cárcel. ¿Seis años por más de un centenar de muertos a mansalva? Es muy poco, pero es. Ese general, su familia y la sociedad saben que fue condenado y deberá permanecer junto a varios cientos de asesinos, cómplices y encubridores en los calabozos especialmente levantados por la democracia para los victimarios. Y eso ya es algo, es mejor que nada, aunque la frase parezca conformista.
Además, ese 16 de octubre de 1998 cambió el concepto de justicia internacional. Pasó a ser también globalizada. Todo esto, que he relatado a saltos y desordenadamente, fue porque en 'The Clinic', hace 10 años, fue detenido Pinochet en Londres.
PD: Y escribo esto después de escuchar el bullicio de la gente en las calles y los bocinazos de centenares de automóviles que celebran algo distinto: el primer triunfo oficial de una selección chilena sobre Argentina, en 80 años, en un partido que jugaron bien y merecieron ganar (y que además demostró que Valdivia no hace falta ni es necesario).
3 comentarios:
Renatito,
Me encantan tus remezones de recuerdos cercanos de tercer tipo. Parecen ya olvidados, pero gracias a tu persistencia, volvemos a evocarlos como piedras que afirman un terreno fangoso compartido.
Me gustaría tan sólo agregar que tal historia ha sido trabajada en una película británica que no se si fue exhibida en Chile: "Pinochet's Last Stand". No le he visto todavía, pero ya la pillé en una tienda de DVDs usados y la miraré con gusto gracias a tu recorderis tan sentido y oportuno.
Oye, ¿y que tienes contra el pobre Valdivia? ¿Chuncho de Pedro Valdivia? No me digas que Chile gana gracias a que este cauro no juega ...
En todo caso, bien por Chile!
Siempre,
Pepe
Cierto lo que dice de Valdivia. Salud y bien por lo que dice respecto al Pinocho. Saludos.
Hola a Renattus y sus seguidores del BlogsPot (yo soy uno de ellos obviamente).Gracias Renattus,gracias,.Yo también soy hombre u oido de radio,para mi la Radio es el medio de comunicación por excelencia (te deja trabajar,hacer el amor ,no te demanda distracciones o manualidades "extras" como el TV o un periodico,etc) asi que Viva la RADIO.Yo aquí en Escandinavia y casi colgado de la plana ciudadd e copenhagen (vivo en el pais de al lado) escucho via internet dos o tres Radios:La Cooperativa,Radio Reloj de Cuba y el sistema TELESURTv venezolano.
Abrasos a todos desde un norte europeo absolutamente trastocado en su desorden climatico y mas de algún imbecil pensará que "bien que le dieron un Nobel a Al Gore" por que es ecologista (pero cuando fué Vice de USA NO HIZO NADA !!!).Pato,Suecia.
Escania,19 Okt-2008
Publicar un comentario