Una eva y dos adanes

No estoy hablando de la famosa película de los años 50, sino de Yelena Isimbayeva, Michael Phelps y Usain Bolt, que son la reina y los reyes de los fabulosos Juegos Olímpicos que terminaron ayer en Beijing.
Han sido unas olimpiadas extraordinarias. Se batieron 35 records mundiales y 83 olímpicos, Jamaica reinó en la velocidad, Kenya y Etiopía ganaron 21 medallas (9 de oro) en fondo y mediofondo, Phelps ganó 8 de oro con 7 records mundiales (completando 14 oros en dos JJ.OO.), Bolt ganó las 3 carreras de velocidad (100, 200 y 4x100) todas con record mundial y la Isimbayeva... bueno, es la reina del atletismo hace rato. Ha batido 24 veces el record mundial y ahora lo hizo una vez más, cuando solo ella y su garrocha quedaban delante de las 91.000 personas que llenaban como todos los días el Nido de Pájaros y querían aplaudirla. Para ellos dió la vuelta olímpica, sonriente, feliz, empática.
El Nido de Pájaros debe ser el recinto deportivo más bello del mundo y el Cubo de Agua va por las mismas. Un conjunto arquitectónico que si en televisión parece increíble como será verlo en la realidad.
China se sacó los zapatos, quiso hacer los mejores Juegos y lo logró, con dos ceremonias (apertura y clausura) espectaculares, con un rendimiento deportivo global sobresaliente y un éxito propio a todo nivel.
Los latinoamericanos, cada vez más atrás. Apenas 2 oros cubanos (110 vallas y lucha greco-romana), 3 para Brasil (salto largo y voleibol femenino y 50m libre), 2 argentinos (fútbol y ciclismo), 2 mexicanos (taekwondo), 1 dominicano (box) y 1 panameño (salto largo hombres). En total: 11 de oro, 19 de plata y 26 de bronce.
Entre las de plata están las del gran Jefferson Pérez para el Ecuador (20 km marcha), la del Feña González para Chile (tenis) y la de un pesista para Colombia, además de 3 brasileras que se suponían de oro (voleibol masc., fútbol fem. y voley playa) y un montón del boxeo cubano que siempre eran oros. Termina la lista con solo un bronce para Venezuela.

Ahora toca esperar lo que deje Londres 2012, que es muy difícil que logre igualar todo lo excepcional hecho por los chinos. Se abrieron al mundo y el mundo se abrió a China. Se inicia una nueva época quizás en las relaciones internacionales. Se verá con el transcurso de los años.