Como peleas de perros

Los renovados se están empezando a dar de mordiscos públicamente. Ese señor Ominami (que se cree aristócrata solo por ser senador desde hace 14 años) se fue contra ese otro caballero Viera-Gallo (que sí se siente conde o duque), por la indicación presentada al proyecto de los 290 millones de dólares p'al Transantiago, que intenta reparar algo de las cagadas que dejó amarradas Lagos antes de dejar el gobierno, en beneficio de 10 grandes empresarios.

Unos meses antes, otra jauría, la del PPD, se mordió de ida y de vuelta. Bitar, Schaulsohn, Girardi, Valenzuela, el inefable Fernando Flores y un montón de otros perros más chicos se dieron con todo y lo más públicamente posible, para que todo el país los pueda calibrar bien.

No hay mucho donde elegir en Chile. Nadie manifiesta tener propuesta de país, nadie parece preocuparse de algo más que los intereses propios y de sus amigos y financistas. Trivelli se presenta por su cuenta, Flores también, Adolfo se muere de ganas y ni qué decir en la derecha: se miran pero no se tragan, nadie con nadie, y todos desconfían del de al lado.
¿Ese es el país "desarrollado" que según ellos están construyendo? Ya lo dijo De la Parra, estos jaguares no son más que jurel tipo salmón.
PD: Jorge Pizarro, senador DC bastante aterrizado y creible, definió anoche en TV esta "pelea de perros" como "una bolsa de gatos". Total, digo yo, todo queda entre animales (16/06).
PD2: He pensado que quizás muchos no sepan a qué me refiero con eso de "los renovados". Bueno, son aquellos personajes que eran socialistas en los 70, que después vivieron un exilio cómodo, tibio y regaloneado en Francia, Italia, Alemania(s), Canadá y hasta EE.UU., y que volvieron absolutamente neoliberales, pero que descaradamente se siguen llamando "socialistas", como Lagos, Ominami, Ricardo Núñez, Garretón y otros. Son los más aborrecibles, por traicionar sus principios, engañar a la gente apareciendo como de izquierda pero actuando como de derecha y no reconocer su vuelta de chaqueta.