Una raya más al tigre

Una vergüenza más, entre las tantas que ha habido que soportar en los últimos 20 años. ¡Qué le hace una raya más al tigre!, dice el refrán popular.
Ayer los noticieros de radio y televisión informaban que por fin la derecha logró llegar a acuerdo para nombrar al nuevo presidente del Senado.
Y han terminando eligiendo a Jovino Novoa, senador de la UDI. Que sea de la UDI ya es demasiado antidemocrático, pero que el designado sea un alto funcionario de la dictadura es vergozoso.
Quien está terminando su año a la cabeza del Senado, Adolfo Zaldívar, es un tipo de centro-derecha, que irradia una imagen de resbaloso, de poco transparente, de "ladino", pero al menos estuvo desde un principio contra la dictadura.
Según el esquema institucional establecido por la Constitución de Pinochet que rige en Chile, el presidente del Senado es la segunda autoridad del Estado, el número 1 en la línea de sucesión. Y es ignominioso que ese cargo sea detentado por alguien que representa la dictadura y no la democracia; que representa la represión dictatorial a la que sirvió como subsecretario del Interior.
Si bien el vaso medio lleno tiene muchas cosas valiosas que rescatar para la convivencia democrática, en este tema el vaso medio vacío es la única opción de mirar tan oprobioso hecho.