Pero a la vez es mucho más que eso. Porque el cambio es trascendente: asume un dirigente del FMNL, Frente Farabundo Martí para la Liberación Nacional, que ha logrado ganarse la opción de hacer un gobierno para todos los salvadoreños y no para las 16 familias que controlan la economía, la sociedad y la política en ese pequeño país. Lo cual también es un riesgo mayor, pues Mauricio Funes seguramente tendrá muchas dificultades para poder llevar a cabo sus propuestas de gobierno.
Terminan 20 años de gobierno de ARENA (Alianza Republicana Nacionalista), el partido ultraderechista conformado por los escuadrones de la muerte del Ejército que con apoyo de Estados Unidos combatieron al FMLN. Con Roberto D'Abuisson a la cabeza, los paramilitares asesinaron a Monseñor Romero, a los seis sacerdotes jesuitas de la Universidad Centroamericana
y a muchos miles de personas más, en una guerra que dejó 75.000 víctimas en los 80.Es muy difícil el camino para Funes, pero al menos confío en que los principios de los dirigentes salvadoreños sean más consistentes. Pueden tener éxitos o fracasos en su gestión, pero ojalá no terminen -como Daniel Ortega- aliándose con sus más enconados enemigos políticos, con los que aseinaron a centenares
de sus compañeros, por el afán de mantener el poder.Solo cabe esperar que comience un nuevo día para la patria del poeta Roque Dalton, del arzobispo de San Salvador Oscar Arnulfo Romero, de la comandante Ana María y de Farabundo Martí, que en los años 30 acompañó a Augusto César Sandino en su lucha contra la presencia norteamericana en Centroamérica.
Más: http://ciperchile.cl/2009/03/19/el-salvador-un-pais-en-la-busqueda-del-centro/
4 comentarios:
Justo en la mañana estuve siguiendo la investidura con guiños a lula y Obama estuve escuchando su discurso,esperemos los mejores augurios.
Los guiños a Obama tienen una razón ineludible: El Salvador depende de las remesas enviadas desde los EEUU por los salvadoreños que viven aquí, cuya gran mayoría mantiene una muy precaria situación legal, que ha estado dependiendo de las acciones del gobierno salvadoreño para que no hayan deportaciones masivas. Funes no puede arriesgar una reacción agresiva de EEUU en este sentido.
En todo caso demuestra pragmatismo.
Lo que yo veo como más positivo de Funes es que se ha abstenido de la verborrea ideológica que caracterizaba a Ortega.
Parece ser una buena transición para un país que mantiene una generación (los que eran jóvenes combatientes o soldados durante la guerra) que ha quedado entrampada en la violencia.
Saludos.
Jorge
valla en algo estamos de acuerdo!!
Y ahora la cloaca llamada OEA acaba de tener la amabilidad de abrir sus puertas al retorno de Cuba. En todo caso, se respiran nuevos aires por estos campos...
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