lunes, 27 de abril de 2009
Pande el cúnico
Yo creo que podría inventarse una nueva sigla, un nuevo término, porque esto podría llamarse Globalización de Enfermedades Contagiadas Virtualmente, o Enfermedades Virtuales Globalizadas, o algo parecido.
Más allá de la chacota, me impresiona la forma en que se propagó el caos por el mundo en cuestión de horas. Los sistemas de salud pública están en alerta máxima, se ha declarado emergencia sanitaria y resulta casi inconcebible que después de tanto revuelo no se produzcan los miles de casos que darían justificación a la alarma mundial.
En esta nueva era de las modernas tecnologías de información, primero fue el SIDA, luego vinieron el mal de las vacas locas y la gripe aviar y ahora esta gripe porcina. Algo sucede que a pesar de los inmensos avances de la ciencia y de la medicina, siempre hay un resquicio por donde se nos cuela un virus nuevo, un mal no contemplado previamente. Es casi contradictorio pero es.
Así que, confiemos en que las alertas darán buenos resultados y no se registrará el caos previsto. Que no panda el cúnico como dice el Chavo.
jueves, 23 de abril de 2009
domingo, 19 de abril de 2009
"La ciudad de los fotógrafos"
El director, Sebastián Moreno, intenta (y lo logra muy bien) mostrar cuál fue la labor que desarrollaron los reporteros gráficos durante la dictadura y cómo poco a poco fueron comprendiendo la dimensión e importancia de su trabajo, pues al estar siempre "ahí" ayudaban a salvar vidas y, también, a recuperarlas, como en el caso de los detenidos-desaparecidos.
Al ver la necesidad de tener una credencial para hacer su trabajo, conformaron la Agrupación de Fotógrafos Independientes, la AFI, que les permitió acompañar con mayor "legalidad" tantas y tantas luchas que dio el pueblo chileno por recuperar la democracia.
El documental va entrevistando uno a uno a una docena de miembros de la AFI, que a través de la revisión de las fotos que cada uno de ellos tomó en esa época, van recontruyendo una historia social y política que aún sigue fresca. Lonquén, las familias Maureira y Recabarren, las protestas en pleno centro, el entierro de André Jarlan, el caso de los degollados y el de Rodrigo Rojas de Negri, fotógrafo de 19 años quemado vivo por los represores, todo va quedando registrado en esta historia que mezcla entrevistas de hoy con archivos de los años 80 en Chile.
Estos fotógrafos muestran también cómo esos años marcaron sus vidas y cómo, además, esa adrenalina que produce esta violencia entre dictadura y pueblo, los llevó en su mayoría a dejar la calle.
¡¡Un gran documento!! que dan ganas que siga contando cosas y que además termina con las canciones del talentoso cantautor Manuel García.
Y al fin de cuentas, viene a ser también un merecido homenaje para los fotógrafos que, en cada lugar donde hay un conflicto, son los que dejan el testimonio de los acontecimientos y sufren muchas veces en carne propia la represión, incluso perdiendo la vida. Casos como los de Julio García en el Ecuador (de cuya muerte se cumplen hoy 4 años), los camarógrafos asesinados durante la invasión de Irak, o los que han caído en Líbano, Palestina, Chechenia, la ex-Yugoslavia, y tantos otros lugares del mundo, no son más que un reafirmamiento de la entrega que día a día hacen los fotógrafos.
Esta es la sinopsis o trailer del documental.
miércoles, 15 de abril de 2009
De tumbo en tumbo, de bochorno en bochorno
A medida que van pasando los días no solo me convenzo que Sebastián Piñera no va a ganar la elección presidencial, sino que veo que la va a perder él con sus errores.
En un sistema tan polarizado, producto del binominalismo impuesto por la dictadura y que la derecha no ha permitido reformar, los candidatos de los dos grandes bloques deben andar con pies de plomo, pues saben que todo lo que hagan o no hagan les será censurado por la coalición rival; sin embargo, cada vez más a menudo Piñera mete las patas.
Ayer fue a una población muy pobre, dizque a solidarizar con la familia de una joven que murió asesinada en un bus por unos muchachos que manipulaban un arma, porque según él "los delincuentes nos tienen rodeados", pero fue sacado a gritos por el resto de familiares, que sienten muy claramente que su dolor está siendo utilizado para una campaña política. Un bochorno para un empresario muy rico que pretende ser presidente de la República, sentir en carne propia que es repudiado por la gente modesta.
Para peor, el diputado de su partido por La Pintana y Puente Alto, para deslindar responsabilidad en el hecho, no encontró nada mejor que achacar al propio Piñera el fiasco, diciendo que el candidato es tan acelerado que no dejó tiempo a su equipo asesor para que preparara la actividad. Lo dijo con sentido de dar una explicación, pero al fin de cuentas lo que hizo fue mostrar que Piñera es un tipo que no da tiempo, que no escucha, que impone su parecer sin razonamiento. No quisiera imaginar lo que sucedería si una persona así llegara a la Presidencia.
Pero esto no es todo. Cuando hace unas semanas estalló el escándalo por la colusión de precios de las farmacias, Piñera salió a repudiar el hecho y a defender el derecho de la población a pagar precios justos por los medicamentos. Al día siguiente, cuando un diputado de gobierno mostró los documentos, Piñera se vio obligado a reconocer que era dueño de un 1% de las acciones de FASA. Obviamente con un 1% ningún accionista tiene posibilidades de incidir en las políticas de una empresa, pero lo que la opinión pública le cuestiona es por qué escondió el hecho, reconociéndolo solo cuando ya la olla se había destapado.
Sobre todo porque tiene antecedentes en estas situaciones: hace unos años, la Administración de Aeronáutica Civil de Estados Unidos aplicó una millonaria multa a Lan Cargo, empresa de Piñera, por... ¡¡colusión de precios!!
Pero hay más: la Superintendencia de Valores aplicó hace más o menos dos años una multa de unos 700 mil dólares aproximadamente (más de 300 millones de pesos, que fue calladito a pagar) a Sebastián Piñera Echeñique, como persona, por haberse beneficiado maliciosamente, utilizando información privilegiada, en una operación de compra- venta de acciones de una de sus tantas empresas.
Ahora solo falta que se meta a opinar sobre la crisis interna de Colo Colo. Porque aunque siempre se mostró como hincha furibundo de la U. Católica (propio de su clase, pues), ahora que el Colo es S.A. y él uno de sus principales accionistas, intenta aparecer como un apasionado colocolino ("money makes the world go round" cantaba Joel Grey en Cabaret, "mmm, money", respondía la maravillosa Liza Minelli). Capaz que en medio del fango en que se debate ese club, Piñera salga en defensa de Barticcioto cuando el Barti se vaya o atacándolo cuando se quede, porque la falta de tino y de ubicatex del candidato de la derecha es cada vez más evidente.
En resumen, no cabe dudas: Piñera es un peligro público y aunque espero que la gente no se deje llevar por la propaganda multimillonaria, creo que más bien será él mismo quien terminará construyendo su propio fracaso, de manera cruel, como dice el bolero (y para goce de la UDI además, jajaja).
PD: El análisis del discurso de la prensa sobre el fiasco de Piñera está muy bien tratado en "Prensa care'raja", de Andrés Almeida F.
miércoles, 8 de abril de 2009
Ayer 20 años cumplí...
En ese momento aparece un importantísimo grupo de autores que 'se atreven' a interpretar sus propias canciones: Emilio José, Camilo Sesto, Manolo Galván, Mari Trini, Cecilia (la autora de Un ramito de violetas), Aute (que había empezado en los 60), Víctor Manuel (asturiano), Danny Daniel, Junior, Perales, entre otros, y algunos latinos radicados por allá, como Alberto Cortez y Angela Carrasco.
Ese grupo de cantautores, en mi opinión, significa un salto cualitativo en la música popular española: le dan más contenido y se preocupan por hacer buena música (más allá que en lo particular muchos de ellos nos gusten o no) y nos fuimos inundando de canciones cantadas en castellano, que tenían textos más elaborados, historias que contar y muy buenos arreglos (como los de Rafael Trabucchelli para Mari Trini por ejemplo y los de Waldo de los Ríos).
En lo personal, dada mi obsesión por la música, solo me he preocupado de regalarme discos (sean singles o long-play) para mi cumpleaños. Así, por ejemplo, me regalé "El año del gato" (The year of the cat) en el 76 y podría hacer una larga lista.
Y el que me compré en 1972 fue el 45 rpm Hispa-Vox de Mari Trini que en esos días arrasaba en las radios: la hermosísima canción "Yo no soy esa", que en el lado B traía el tema "Ayer".
Ese disco, que fotografié y muestro aquí, lo dejo como homenaje a una mujer que tenía un estilo muy particular para escribir sus canciones, que yo a grandes rasgos definiría como directo, intenso, sensible y cautivador.
martes, 7 de abril de 2009
Que bieeeennnnn
Fujimori fue declarado culpable de los delitos de homicidio calificado, lesiones graves y secuestro agravado. Según precisó el tribunal, la condena se contabilizará desde el 7 de noviembre de 2005, cuando fue detenido en Santiago, y hasta el 10 de febrero del 2032.
El presidente de la sala, César San Martín, declaró que los cargos contra Fujimori están probados más allá de toda duda razonable. "Cabe afirmar que el tribunal ha llegado a una certeza razonable. Este tribunal declara los cuatro cargos objeto de imputación se encuentran probados más allá de toda duda razonable, por consiguiente la sentencia que se emite es condenatoria", sentenció el jurista.
Fujimori ha sido acusado por su responsabilidad en las matanzas de Barrios Altos y La Cantuta, que dejaron 25 muertos en 1991 y 1992, y los secuestros de un periodista y un empresario en 1992.
San Martín precisó que el grupo para militar encubierto Colina, autor material de las matanzas, cometió 50 asesinatos en 15 meses de actividad y que el gobierno de Fujimori desarrolló una febril actividad para ocultar los hechos una vez que se conocieron públicamente.
Además, la justicia peruana le impuso una reparación civil de más de 20 mil dólares como pago compensatorio a cada una de las familias de las víctimas durante su mandato entre 1990 y 2000.
Ojalá a los condenados por terrorismo de Estado los pasearan también con camisas a rayas, como hacía Fujimori con los demás terroristas, como Abimael Guzmán por ejemplo.
sábado, 4 de abril de 2009
Alfonsín, Felipe y Raúl
Raúl Alfonsín fue el presidente de la vuelta a la democracia en Argentina, el primero que en América Latina logró acceder al poder después de las dictaduras que asolaron el continente en los 70 y 80. Y por lo tanto, el primero que tuvo que enfrentar las secuelas de las graves violaciones a los derechos humanos, que dejaron decenas de miles de asesinados y desaparecidos.
Como no recordar esa jornada de octubre del 83, cuando ganó la presidencia, y sobre todo la del 10 de diciembre, cuando el Dr. Alfonsín asumió el poder, dando un poco de aire y de respiro a un país asediado por la represión.
Estábamos en Quito, en casa de Coqui y Susy, compartiendo con muchos argentinos que alcanzaron a salir al exilio, “los que aún estamos vivos”, como tan bien los definía Víctor Heredia en ese hermoso poema en forma de carta a Alfonsín, de tremendo contenido y metáforas notables, que aprovecho de colocar en el podcast junto a este artículo, el “Informe de la situación”.
Después vino el juicio a los dictadores. Histórico. Un país entero y casi todo un continente, siguiendo con horror los más aberrantes relatos que se hubieran escuchado en el mundo desde los juicios de Nürenberg. Y la sentencia a los Videla, Massera, Agosti y demases. Y el NUNCA MAS que como un grito salió de las páginas del informe de la Comisión de la Desaparición de Personas, creada por Alfonsín y presidida por ese hombre intachable llamado Ernesto Sábato.
Al final, la hiperinflación y los levantamientos militares llevaron a Alfonsín a promulgar las leyes de Punto Final y Obediencia Debida, con que quisieron evitar pagarle a la sociedad sus crímenes y a dejar el gobierno anticipadamente en julio de 1989.
Felipe Cruzat, en cambio, es un niño de 11 años que necesitaba un transplante y durante más de 90 días esperó un corazón, que nunca llegó.
Hoy finalmente murió en la espera y seguramente Felipe se transformará en el símbolo de la donación de órganos, de cómo se pierden vidas por falta de solidaridad.
Como digo siempre, el chileno de hoy (me refiero en términos generales, al promedio) es tan egoísta, tan preocupado solo de SU metro cuadrado, del individualismo consumista, que la donación de órganos ha ido en franco retroceso, las cifras son dramáticas. La gente se ha negado incluso en casos en que el fallecido había declarado su deseo de ser donante.
Y esto trae como consecuencia que cada vez sea más difícil salvar la vida a quienes solo pueden hacerlo a través de transplantes, sean hígado, riñones, corazón, etc.
Por último está Raulito. Era un muchacho normal. 30 años, dos hijos. Trabajador, buen mueblista, simpático, cariñoso. Nunca se metió en nada… hasta el martes. Solo se sabe que alguna vez había comentado que esta sociedad no permite surgir a la gente aunque se mate trabajando, que solo los que roban logran salir adelante.
Quizás cómo llegó a eso, pero el martes esperaba en un vehículo al grupo que entró a robar en un supermercado. Los balazos del dueño del local asaltado lo mataron ahí mismo.
Para mí, el caso de Raúl simboliza el drama social de la delincuencia. Una sociedad en que solo un pequeño grupo tiene mucho-mucho-mucho, mientras las grandes masas no tienen perspectivas, se sienten discriminados desde la cuna y son estigmatizados por la prensa y por los políticos.
La derecha no tiene propuestas para ellos, excepto meterlos a todos a la cárcel, como si encarcelar a millones de personas que viven en los barrios populares fuera la solución a este problema social, lo que es azuzado diariamente por los noticieros de televisión.
La crisis va aumentando la angustia y la impotencia. El desempleo genera estrés, problemas familiares y todo se transforma en un círculo vicioso. Pero nadie sabe qué hacer, racionalmente, o no se atreve, no sé. Y el problema sigue creciendo.
¿Alguien recuerda el “caracazo”? Millones de pobres bronqueando en los barrios ricos. ¿Queremos llegar a eso? Supongo que no, pero entonces hay que hacer algo...